miércoles, 10 de julio de 2019

El Patrimonio Defensivo de la Provincia de Sevilla


Torre del Águila. Utrera
Gracias a series de televisión como Juego de Tronos [1] y La Peste [2], espacios singulares del patrimonio arquitectónico provincial como El Alcázar y las Atarazanas en Sevilla, el Palacio y Torre de Gandul y el Castillo de Marchenilla en Alcalá de Guadaíra, entre otros, fueron noticia en su día como escenario de rodaje, y en parte, parada de la correspondiente ruta turística creada al uso y abuso, según el caso, de lo cultural y lo turístico.

Castillo de Marchenilla. Alcalá de Guadaíra

Estas y otras edificaciones de carácter monumental relacionadas con la defensa de la población, la vigilancia y control del territorio, localizadas tanto en el casco antiguo de la localidad, como en el alto natural del la tierra llana de la campiña o del espacio serrano, constituyen un conjunto patrimonial especifico de valor histórico, arquitectónico y paisajístico: El Patrimonio arquitectónico defensivo.

Castillo de Las Aguzaderas. El Coronil

Forman parte de este patrimonio edificaciones diversas, de diferentes épocas, estructura y materiales, como los conocidos o al menos más visibles castillos y torres; también edificios agrícolas, religiosos y puentes fortificados; ciudades con recinto amurallado o abaluartado; fuertes aislados abaluartados o fusileros del siglo XIX; así como otras estructuras de carácter militar relacionadas con nuestro pasado lejano, castros, motillas, poblados prehistóricos fortificados, oppida, o reciente como trincheras, casamatas, fortificaciones de campaña, etc.

Castillo del Águila. Alcalá de Guadaíra

De acuerdo con esta clasificación y los inventarios realizados a finales de los 60 [3] y 90 [4] del siglo pasado, la provincia de Sevilla contaría con 85 edificaciones de carácter patrimonial catalogadas como Bien de Interés Cultural. Algo más de la mitad (49), Castillos Medievales como el de Los Molares y Marchenilla en Alcalá de Guadaíra; casi un tercio (22), Torres como la del Águila en Utrera y Troya en el Palmar; una docena de Recintos amurallados en barrios antiguos de Sevilla, Carmona o Alcalá del Río; más 2 Edificios fortificados como los cortijos de San Clemente en Dos Hermanas y La Torre en Guillena.

Castillo de Los Molares. Los Molares

Como patrimonio cultural y arquitectónico su conservación se realiza en el ámbito de la política cultural y la ordenación del territorio y urbanismo municipal, incluyendo diferentes instrumentos de planificación sectorial de carácter estatal [5], regional [6] y local en forma de planes especiales.

Puente Fortificado de La Alcantarilla. Utrera

Con la pérdida de su función, castillos, torres y murallas fueron objeto de abandono, cuando no de acoso y derribo, en aras del correspondiente ensanche de la ciudad, o fuente de sillares y materiales para la nueva edificación. A pesar de su reconocimiento patrimonial, tanto en el campo como en la ciudad, gran parte de la arquitectura militar o defensiva fue desmantelada a base de pico y pala; otra parte convertida a ruina y ripios por terremotos como los del 1504 y 1755, o simplemente por el abandono y el olvido de sus propietarios y las administraciones responsables de su conservación y tutela, respectivamente.

Palacio y Torre de Gandul. Alcalá de Guadaíra

El estado actual de las edificaciones que sobreviven es muy variado. En el ámbito urbano, lo monumental del correspondiente alcázar y castillo, reconvertido a parador o equipamiento municipal, ha permitido conservar parte de su arquitectura original; en otros casos, murallas y torreones, acabaron desapareciendo formando parte de nuevas viviendas y, con suerte, como ruina, objeto de la correspondiente ruta de misterios y leyenda de la Villa.

Torre de La Lopera. Utrera

En el campo, lejos de la capital, y más allá del núcleo principal del municipio, el paso del tiempo no ha dejado títere con cabeza, ni tampoco castillos ni torres. Como comentamos en el caso de las del Águila y La Lopera, por activa y pasiva de unos y otros, la conservación del patrimonio defensivo parece más discurso y simple ficha del correspondiente catálogo urbanístico que ejercicio efectivo de competencias y cumplimiento de obligaciones.

Castillo de Utrera. Utrera

Si ya es difícil que el patrimonio cultural sea objeto de interés en el ámbito local, convencer a los responsables de que, más allá del casco histórico de la ciudad o pueblo, hay otros elementos de igual o más interés patrimonial es tarea prácticamente imposible, salvo raras, muy raras excepciones.


Murallas. Alcalá del Rïo

La idea de territorio y el papel fundamental que el patrimonio defensivo tuvo en su construcción, pongamos por ejemplo en el ámbito de la banda gallega o la morisca, sigue siendo hoy día más objeto de investigación que convencimiento y acción positiva de autoridades y propietarios.

Torre de Los Herberos. Orippo. Dos Hermanas

Las oportunidades de intervención desde la planificación estatal o regional en la materia se centran en el patrimonio de titularidad pública. Aquello de la cooperación público-privada en beneficio del interés general del patrimonio queda bien como discurso pero no deja de ser cosa difícil y poco probable.

Cortijo y Torre de Troya. El Palmar de Troya
Desde Sevilla Patrimonio seguiremos con la tarea de dar visibilidad y difusión general a este patrimonio provincial. En próximas entradas abordaremos elementos o conjuntos de edificaciones de interés en los dos principales ámbitos provinciales, el de la banda morisca y la gallega, fronteras antiguas entre los Reinos de Sevilla, Granada y Portugal.

+INFO
[1] Juego de Tronos. Filmaffinity 
[2] La Peste. Filmaffinity.
[3] MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CIENCIA (1968). Inventario de protección del patrimonio cultural europeo, IPCE: España. 2. Monumentos de arquitectura militar, inventario resumido.
[4] Inventario Nacional de Arquitectura defensiva. Asociación Española de Amigos de los Castillos 
[5] MINISTERIO DE EDUCACIÓN, CULTURA Y DEPORTE. Plan Nacional de Arquitectura Defensiva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario